Con el Estatuto
Municipal de 1924 se abrió el canal que utilizaría Puerto de Cabras para
agregar definitivamente la jurisdicción tetireña, logrando su extinción como
ente local en 1925; momentos en que ya se concentraba en Puerto Lajas un
importante número de habitantes procedentes de la Vega y de los pagos pesqueros
de Cotillo y Corralejo que continuaron llegando a la zona de forma estacional,
huyendo de los temporales de la mar del norte para desarrollar su actividad
desde el Jablito hasta La Torre ,
y ocupándose, muchos de ellos, como ya vimos en tareas agrícolas.
Hacia 1926 l os ya vecinos de
Puerto de Cabras pedían autorización para erigir una ermita en Puerto Lajas y
que, al parecer, lograron años más tarde, venerándose en ella una pequeña imagen de la Virgen del Pino. Arruinado
aquel primer templo se resguardó la imagen en el almacén que sirvió de escuela
y en otra casa de “la pestana” o puntilla, hasta 1964 en que la Inspección de Enseñanza
decidió cerrar aquella escuela Mixta.
Fue aquella
circunstancia la que, al decir del párroco Leonilo Molina Ruiz, provocó que en
el marco de la Cruzada
del Rosario, el vecindario se comprometiera en octubre de 1965 a levantar nueva ermita
sobre un solar donado por Ángel González Brito. Con el trabajo de todos y con
las donaciones particulares se acumuló un dinero que se destinó a terminarla,
mandándose fundir la campana en Badajoz. Y se utilizó la hornacina del antiguo
retablo de Puerto de Cabras para alojar la imagen de la Virgen. Monseñor Socorro
Lantigua –escribía don Leonilo- se comprometió a donar una imagen mayor,
mandándola tallar en la
Península como réplica de la patrona de la Diócesis Canariense ,
de Teror.
Recorte de prensa: La fiesta de Puerto Lajas, 1967, un año después de la bendición de la ermita. |
Y llegó a Puerto
Lajas una tercera imagen del Pino que habían sufragado los miembros de la
colonia canaria para su santuario de Sidi-Ifni; aunque, según don Leonilo, fuese
donada por el obispo Infantes Florido. Otra versión nos cuenta que fue el
matrimonio de Maximino Umpiérrez y Juana Rodríguez quienes la metieron entre
sus bártulos cuando por el teleférico de Sidi-Ifni embarcaron rumbo a
Fuerteventura, tras la cesión de aquel territorio a Marruecos (1968-69).
Sea como fuere, esta última imagen, de las
denominadas de vestir, fue esculpida por quien fuera alcalde de Telde, José de
Armas Medina, escultor.
Y quizás con aquel
gesto se pagara la vieja deuda contraída por aquel puerto africano desde cuando
se sacó la arena de las playas de El Matorral y de Puerto Lajas para fabricar
los famosos bloques del Puerto de Ifni.
Por más que se empeñen los planes parciales en su
desarrollo, también Puerto Lajas tiene su núcleo histórico en la Pestana o Puntilla,
conservándose allí pocas de sus edificaciones –es cierto-, pero la evolución
técnica y material ha remozado aquellos adaptándolos a los tiempos que corren;
y aún así quedan interesantes vestigios…///...
Copyright Francisco Javier Cerdeña Armas